Como es de comprender, existen muchos mecanismos para poder acceder a la información, es por ello, que se hace necesario que las personas deban de ayudarse con una serie de métodos o de técnicas que permitan acercarse al fenómeno y lograr de este una comprensión mayor.
Para ello, se recurre al método científico, entendiendo por este el proceso conforme al cual la persona inicia una investigación formada por una serie de etapas, que se llevan a cabo con arreglo a las leyes de la lógica intelectual.
Mucho se ha especulado respecto a este tema, por considerarlo como una parte imprescindible del mismo proceso o bien como parte espuria, lo cierto, es que el problema es el objeto del planteamiento, de modo tal, que no se puede proceder a establecer una interrogante, sin haberse detectado el problema.
En sentido general, se entiende por problema todo aquel aspecto de la realidad que amerita de una solución, es decir, este debe de corresponderse con una duda o bien manifestación de duda o curiosidad, que la persona sienta por algún hecho.
Pero no solo basta con que se trate de una duda, sino que esta debe de estar manifestada o bien fundada en un fenómeno cierto o bien tangible, es decir, que el aspecto de la realidad debe de ser susceptible no solo de contemplación analítica sino también de captación sensorial.
Por lo cual, se hace necesario que las personas debe de fundar en principio su investigación en un detalle de la realidad poco conocida o bien poco investigada, sobre la cual se formulará la preguntará que dará inicio al proceso investigativo.
Es por ello, que se considera un aspecto de gran relevancia el conocer el concepto de problema de investigación, para poder comprender que trata o consiste su planteamiento, para con ello facilitar la formulación del mismo.
Tanta así es la importancia que este mantiene o representa que la mayoría de las personas expertas en metodología consideran que la clave para una buena investigación se halla presente en el problema y en el correcto planteamiento del mismo.
De modo tal, que expertos en metodología consideran que al existir un correcto planteamiento del problema, la investigación en gran medida se garantiza y los resultados se encausan hacia un conocimiento cierto.
No se puede hablar del planteamiento de investigación ni comprender su significado, sin antes haber disuadido las dudas respecto al problema de investigación en su totalidad, una vez explicado su término y su concepto, corresponde hacer mención a los tipos de problemas que pueden existir.
El primero de estos tipos reside en los problemas de connotación práctica, es decir, de aquellos que se centran en los aspectos tangibles del fenómeno, pero que no han sido percibidos de forma adecuada, por lo que existe una especie de distinción entre lo que es y lo que debe ser.
La idea es plantear el problema de forma práctica, por lo general, estos derivan de situaciones sociales especiales en los que se puede ver plasmado una circunstancia de forma errónea, que amerita ser tratado con una alternativa de solución.
Si bien es cierto, que la investigación no va a aportar una solución definitiva como tal, o bien va a buscar una respuesta exclusiva, es de comprender que la misma, puede ofrecer respuestas satisfactorias a las expectativas de los investigadores, o bien aproximaciones a la solución.
Desde la otra perspectiva, es posible apreciar los problemas de origen teórico o bien cognoscitivo, o lo que es lo mismo, aquellos problemas que se centran realmente en lo desconocido, es decir, en aspectos de la realidad que no han sido investigados como tal, y que ameritan de una investigación más exhaustiva.
Es por ello, que estamos hablando en este caso, de problemas que se reducen a la investigación teórica, y que contemplan análisis exhaustivos, exigiendo una mayor disposición mental de parte del individuo.
Siendo estos aquellos que buscan por medio de sus conclusiones plantear realmente soluciones a sus interrogantes, ya que los resultados obtenidos son novedad cognoscitiva respecto al fenómeno desconocido.
Ahora bien, para puntualizar los aspectos ya referidos sobre el problema de investigación, corresponde en que momentos procede la formulación de un problema de investigación y por ende su planteamiento.
El cual se corresponde con una serie de condiciones previas que han de ser consideradas, tal es el caso que debe de existir un vacío de conocimiento, es decir, que la persona que investiga debe de desconocer algo o bien algún aspecto del fenómeno.
Dicho fenómeno, es una porción de la realidad, que no ha podido ser investigada y que representa un vacío para la disciplina, que no ha podido ser abordado en un momento determinado, dejando sin dudas un vacío en el mismo.
También es posible que se proceda al planteamiento del problema, cuando este debe de disuadir las dudas presentes entre dos investigaciones, es decir, cuando se establecen resultados contradictorios entre dos análisis, debiendo realizarse una tercera que contravenga las anteriores o bien aclare las dudas.
En este caso, se hace referencia al aspecto más notorio del método científico, que como recordaras es correctivo, es decir, enmienda todas aquellas fallas que puedan presentarse en determinada área cognitiva.
Una vez aclarado, todo lo que corresponde al problema de investigación, nos corresponde abarcar el tema principal de los siguientes artículos, cual es el abreboca o bien la presentación del problema, es decir, el planteamiento del problema.
Y es que si el problema en sí, queda reducido a una pregunta, el planeamiento del problema se corresponde con el hecho de que la persona debe de realizar una descripción exhaustiva en la que señale la situación objeto de estudio, es decir, debe de referirse a los distintos aspectos que puedan envolver el mismo.
Tal es el caso, de ubicar la investigación en el debido contexto, es decir, la correcta delimitación de la misma en una porción de la realidad, lo cual obedece a la circunscripción del problema en las fronteras del conocimiento, estableciéndose de dicha forma un límite entre los aspectos más importantes de la propia investigación.
Ya que para todo ello, es necesario que la persona entienda que debe de analizar la situación de forma general, hasta ir a sus aspectos más particulares, es decir, que el planteamiento del problema presenta una serie de características que lo definen que veremos a continuación.
Debe de reconocer la condición de desconocido o bien de poco investigado del problema, es decir, que este debe de reducirse a una serie de condiciones manifiestas, donde se conoce que el fenómeno no es conocido, o lo que es lo mismo, se debe de reconocer que este no ha sido bien investigado.
Por lo que el planteamiento reconoce el área y el vacío de conocimientos que existen entorno a la misma, llevando con ello una serie de consecuencias cognitivas y analíticas, que implican la investigación exhaustiva del fenómeno, para poder determinar los aspectos más relevantes del mismo.
Por lo que más simple para poder elaborar, se reduce al hecho de poder establecer una serie de pautas entorno al mismo, que permitan disgregarlo, es decir, se divide el problema en partes, que se estructuran de lo más general a lo más particular, es decir, que se levanta el planteamiento así:
Se describe la realidad de forma compleja en toda su extensión, hasta llegar al final a describir situaciones específicas, es decir, se realiza un análisis deductivo sobre el problema, hasta llegar a la pregunta que es lo que realmente se desea investigar.
Es decir, que se debe de conocer de antemano cual es el problema, para proceder de forma correcta al planteamiento del problema, para poder así describir el fenómeno y su situación actual de forma correcta.